Ⅰ

En la enormidad del universo,

tantas criaturas viven y se reproducen,

siguiendo la ley de la vida continuamente,

respetando una regla constante.

Los que mueren se llevan las historias de los vivos,

que repiten la misma trágica historia de los muertos.

Así la humanidad debe preguntarse:

¿por qué vivimos y por qué debemos morir?

¿Quién está al mando de este mundo?

¿Quién ha creado a la humanidad?

¿Acaso la naturaleza ha creado la humanidad?

¿Está realmente la humanidad en control de su propio destino?

El hombre no sabe quién es el Soberano del universo

y menos conoce el inicio y el futuro de la humanidad.

Está forzado a vivir bajo esta ley.

Nadie puede evitarla y nadie puede cambiarla,

porque existe Uno solo por siempre y por la eternidad

que reina sobre todas las cosas del universo.

Ⅱ

Él es el único que nunca ha sido visto por el hombre,

el único a quien el hombre nunca ha conocido,

el hombre nunca ha creído en Su existencia,

pero Él le ha dado su aliento de vida.

Él es quien lo nutre y lo guía,

el hombre depende solo de Dios.

Es el soberano y reina sobre todo el universo.

Él rige las estaciones

y causa la lluvia, la nieve y el viento.

Él da al hombre la luz del sol

y hace caer la noche.

Es quien creó el cielo y la tierra,

y dio al hombre los ríos,

las montañas y los seres vivos.

Ⅲ

Su obra y Su poder son omnipresentes,

Su sabiduría y Su autoridad lo son también.

Estas leyes y reglas manifiestan Su obra,

y cada una de ellas revela Su sabiduría y autoridad.

¿Quién puede escapar a Su soberanía?

¿Y quién puede evitar Sus designios?

Las cosas existen bajo Su mirada,

y viven bajo Su soberanía.

Su obra y Su poder dejan una opción a la humanidad:

reconocer el hecho que Dios existe

y reina sobre todas las cosas.

Ⅳ

La humanidad vive y muere bajo los ojos de Dios,

por Su gestión.

El hombre va y viene una y otra vez.

Sin excepciones, todo es parte de Su soberanía.

La gestión de Dios siempre avanza.

Haciendo consciente al hombre

de Su existencia y Su soberanía,

que así observa Su obra y regresa a Su reino.

Este es el plan y la obra

que Dios realiza durante miles de años.

Este es el plan y la obra

que Dios realiza durante miles de años.

Adaptado de La Palabra, Vol. I. La aparición y obra de Dios. Apéndice III: El hombre sólo puede salvarse en medio de la gestión de Dios