Si el hombre llama Jesucristo a Dios,

pero ignora que comenzó una nueva era

y nueva obra en los últimos días,

si el hombre sigue esperando a Jesús el Salvador,

¿acaso podría el hombre verlo descender desde el cielo?

Dios los llama no creyentes, las personas así no lo conocen,

su creencia en Dios es falsa.

No esperan la llegada de Dios, sino la del Rey de los judíos.

No anhelan que Dios aniquile este mundo impuro en el que viven,

sino el retorno de Jesús,

porque creen que salvará a la humanidad de esta tierra corrupta.

¿Cómo pueden ser estas personas

las que en los últimos días completen la obra de Dios?

Si el hombre llama Jesucristo a Dios,

pero ignora que comenzó una nueva era

y nueva obra en los últimos días,

si el hombre sigue esperando a Jesús el Salvador,

¿acaso podría el hombre verlo descender desde el cielo?

Los deseos del hombre no pueden cumplir

los deseos de Dios ni completar Su obra.

Solo aman Su obra pasada,

sin saber que Él es el Dios mismo,

que siempre es nuevo y nunca viejo.

El hombre sabe que Él es Jehová y Jesús,

pero no sabe que el Último es Él, el que pondrá fin al hombre,

que solo sabe lo que piensa y ve,

sus propios conceptos provocan su anhelo.

No está de acuerdo con la obra de Dios, sino en su contra.

Si Dios obrara según las ideas del hombre, ¿cuándo terminaría?

¿Cuándo podría la humanidad reposar,

o Dios en el séptimo día entrar, en el Sabbat?

Dios obra de acuerdo con Su plan y con Su propósito,

no con el deseo del hombre.

Si el hombre llama Jesucristo a Dios,

pero ignora que comenzó una nueva era

y nueva obra en los últimos días,

si el hombre sigue esperando a Jesús el Salvador,

¿acaso podría el hombre verlo descender desde el cielo?

De “Seguir al Cordero y cantar nuevos cánticos”