Palabras diarias de Dios: Conocer a Dios | Fragmento 4

13 May 2020

Si en el caso de una persona que ha seguido a Dios durante muchos años y ha disfrutado de la provisión de Sus palabras durante ese tiempo, su definición de Dios es, en esencia, la misma que la de alguien que se postra en homenaje delante de ídolos, esto indicaría que esa persona no ha alcanzado la realidad de las palabras de Dios. Esto se debe a que, simplemente, no ha entrado en la realidad de las palabras de Dios y, por esta razón, la realidad, la verdad, las intenciones y las exigencias sobre la humanidad, todas ellas inherentes a las palabras de Dios, no tienen nada que ver con esa persona. Es decir, independientemente de lo duro que pueda trabajar esa persona en el significado superficial de las palabras de Dios, todo es en vano: dado que lo que persigue son meramente palabras, lo que obtiene, necesariamente, serán también meramente palabras. Ya sea que las palabras pronunciadas por Dios sean sencillas o profundas en apariencia, todas ellas son verdades indispensables para el hombre a medida que entra en la vida; son la fuente de aguas vivas que le permiten sobrevivir tanto en el espíritu como en la carne. Proveen lo que el hombre necesita para seguir vivo; los principios y el credo para conducir su vida cotidiana; la senda que debe tomar hacia la salvación, así como su meta y dirección; cada verdad que él debería poseer como un ser creado delante de Dios y toda verdad sobre cómo obedece y adora el hombre a Dios. Son la garantía que asegura la supervivencia del hombre, el pan diario del hombre, y también el apoyo firme que le permite ser fuerte y mantenerse en pie. Son ricas en la realidad de la verdad con la que los seres humanos creados viven la humanidad normal; ricas en la verdad por la cual los seres humanos se liberan de la corrupción y eluden las trampas de Satanás; ricas en la enseñanza, la exhortación, el aliento y el consuelo incansables que el Creador brinda a la humanidad creada. Son el faro que guía y esclarece a los hombres para que comprendan todo lo que es positivo, la garantía que asegura que los hombres vivirán y tomarán posesión de todo lo que es justo y bueno, el criterio por el que todas las personas, todos los eventos y todos los objetos son medidos, y también la brújula que lleva a los hombres hacia la salvación y la senda de la luz. Solo al experimentar de manera práctica las palabras de Dios al hombre se le puede suministrar la verdad y la vida; solo en esto puede llegar el hombre a entender lo que es la humanidad normal, lo que es una vida con sentido, lo que es un auténtico ser creado, lo que es la verdadera obediencia a Dios; solo en esto el hombre puede llegar a entender cómo debería preocuparse por Dios, cómo cumplir con la obligación de un ser creado y cómo poseer la semejanza de un hombre real; solo en esto el hombre puede llegar a comprender lo que quieren decir fe y adoración genuinas; solo en esto puede llegar a entender el hombre quién es el Soberano de los cielos y la tierra y de todas las cosas; solo en esto puede el hombre llegar a comprender los medios por los cuales Aquel que es el Amo de toda la creación gobierna, dirige y provee a la creación, y solo en esto puede el hombre llegar a entender y comprender los medios por los cuales Aquel que es el Amo de toda la creación existe, se manifiesta y obra. Separado de la experiencia real de las palabras de Dios, el hombre no tiene un conocimiento verdadero ni una profunda comprensión de Sus palabras y de la verdad. Ese hombre es, claramente, un cadáver viviente, un total caparazón, y todo el conocimiento relativo al Creador no tiene nada que ver con él. A los ojos de Dios, tal hombre nunca ha creído en Él ni lo ha seguido nunca, y, por tanto, Dios no lo reconoce como creyente en Él ni como Su seguidor; mucho menos, como un auténtico ser creado.

La Palabra, Vol. II. Sobre conocer a Dios. Prefacio

Ver más

Ahora ya han aparecido varios desastres inusuales, y según las profecías de la Biblia, habrá desastres aún mayores en el futuro. Entonces, ¿cómo obtener la protección de Dios en medio de los grandes desastres? Contáctanos, y te mostraremos el camino.

Deja un comentario

Compartir

Cancelar